PITAHAYA AMARILLA: DELICIA TROPICAL Y TESORO ECUATORIANO
La Pitahaya amarilla (Selenicereus megalanthus) es una fruta exótica de origen tropical que ha conquistado los paladares de todo el mundo. Con su sabor dulce y refrescante, este fruto se ha convertido en un auténtico tesoro, especialmente en Ecuador, donde su producción y comercialización han florecido. En este artículo, exploraremos la fascinante historia, áreas de producción, comercialización y usos culinarios de la Pitahaya amarilla.
1) ORIGEN DE LA PLANTA: UN VIAJE A TIERRAS ANCESTRALES
La Pitahaya amarilla es originaria de América tropical, en particular de la región de los Andes en Sudamérica. Se cree que esta planta ha sido cultivada durante siglos en Ecuador, Perú y Colombia. Los registros históricos sugieren que los antiguos incas ya disfrutaban de esta fruta como parte de su dieta.
2) ÁREAS DE PRODUCCIÓN: ECUADOR Y SU ROL DESTACADO
Ecuador se ha destacado como uno de los principales productores de Pitahaya amarilla en el mundo. Las condiciones climáticas ideales, con temperaturas cálidas y una variedad de microclimas, hacen que este país sea perfecto para el cultivo de la planta. Regiones como Loja, Manabí y Santa Elena son conocidas por sus extensos campos de Pitahaya amarilla. Además, la Pitahaya amarilla se cultiva en otras partes del mundo, como México, Israel, Tailandia y Vietnam, pero Ecuador es uno de los líderes en la producción y exportación de esta fruta.
3) COMERCIALIZACIÓN: DEL CAMPO A LA MESA GLOBAL
La comercialización de la Pitahaya amarilla ha experimentado un auge en los últimos años, gracias a su creciente popularidad. Esta fruta se exporta a numerosos países, incluyendo Estados Unidos, Canadá y países europeos. Además, su versatilidad en la cocina ha llevado a su uso en jugos, ensaladas, postres y cócteles exóticos.
En Ecuador, la comercialización es una parte integral de la economía local. La Pitahaya amarilla se encuentra en mercados locales y supermercados, y los agricultores a menudo la venden directamente en las carreteras. La producción y exportación de Pitahaya amarilla han brindado oportunidades económicas a las comunidades locales, promoviendo un desarrollo sostenible.